Cuando hablamos de las partes de la carrocería de una van, sus piezas cumplen funciones clave que impactan directamente en el espacio interior, la resistencia estructural y la funcionalidad del vehículo. Ya sea que estés buscando comprar una van o trabajar en su mantenimiento, conocer cada parte de su carrocería te ayudará a tomar decisiones más informadas. Por ello, te presentamos un recorrido por los principales componentes de la carrocería de una van.

Estructura general de la carrocería en una van

Las vans, o también conocidas como furgonetas, se caracterizan por tener un diseño más alto, espacioso y funcional, perfecta para transporte de pasajeros, carga o usos comerciales. Su carrocería está compuesta por un conjunto de piezas metálicas (principalmente acero o aluminio) unidas mediante soldadura o ensamblaje, formando una estructura rígida y segura.

En este tipo de vehículos, la carrocería no solo cumple una función estética: también es parte fundamental del sistema de protección y soporte. Gracias a ella, se absorben impactos, se protegen los ocupantes y se garantiza la integridad del vehículo en condiciones de uso exigente.

Principales partes de la carrocería de una van

1. Panel frontal

Es la parte delantera de la van, donde se encuentran integradas piezas como:

• - Capó: Cubre el motor y permite el acceso para su mantenimiento.
• - Parrilla frontal: Protege el radiador y favorece la ventilación del motor.
• - Parachoques delantero: Diseñado para absorber impactos frontales de baja velocidad.
• - Faros principales y luces auxiliares: Elementos de visibilidad y seguridad vial.

El panel frontal de una van suele tener una forma más recta o elevada respecto a otros vehículos, optimizando el espacio interior.

2. Laterales

Los paneles laterales de una van cumplen funciones tanto estructurales como de protección. Se extienden a lo largo de ambos lados del vehículo e integran las puertas delanteras, que permiten el acceso al puesto de conducción, así como las puertas corredizas laterales, muy comunes y útiles para facilitar la entrada en espacios reducidos.

También, incluyen paneles laterales fijos, reforzados para mantener la rigidez estructural y proteger el interior. Dependiendo del tipo de van, ya sea de carga o de pasajeros, los laterales pueden contar con ventanillas o estar completamente cerrados, adaptándose así a diferentes necesidades de uso.

3. Techo

El techo en una van tiene un rol importante, ya que no solo cubre el vehículo, sino que también aporta funcionalidad. Algunas vans incorporan techos elevados, lo que permite que una persona pueda estar de pie en su interior, optimizando así el espacio disponible para usos comerciales o recreativos.

Incluso, el techo puede incluir opciones de equipamiento como portaequipajes, claraboyas o techos solares, según las necesidades del usuario. Esta pieza está firmemente unida a los pilares y paneles laterales, formando parte de la estructura que da rigidez y seguridad al vehículo.

4. Parte trasera

En la parte posterior encontramos:

• - Puertas traseras: Pueden ser batientes (tipo libro) o con apertura hacia arriba (tipo portón).
• - Parachoques trasero: Protege en maniobras o colisiones por detrás.
• - Luces traseras: Incluyen freno, reversa, intermitentes y posición.

En vans de carga, las puertas traseras tienen doble función. Permiten el acceso amplio al espacio de carga y pueden incluir ventanas para mejorar la visibilidad.

5. Piso o base estructural

Aunque a veces se olvida, el piso de la carrocería no puede pasar desapercibido. Es donde se apoyan los asientos, el sistema de fijación de carga y, en muchos casos, los componentes del sistema de suspensión o escape. En las vans, el piso está reforzado para soportar peso adicional, especialmente en modelos de trabajo o transporte comercial.

6. Pilares y marcos estructurales

Los pilares (A, B, C y D) son columnas verticales que sostienen el techo de la van y refuerzan el marco de las puertas. Debido al tamaño y peso de estos vehículos, su presencia es valiosa para garantizar la estabilidad. Además, forman parte de una estructura conocida como "jaula de seguridad", diseñada para proteger a los ocupantes en caso de colisión.

El pilar A sostiene el parabrisas y las puertas delanteras, mientras que el pilar B se ubica entre las puertas delanteras y traseras. Los pilares C y D refuerzan la parte trasera del vehículo, cuya presencia dependerá de la longitud de la van. Así, cada uno cumple una función estructural para la seguridad.

Mantenimiento y personalización de la carrocería

Las partes de la carrocería de una van no solo deben mantenerse limpias, sino también libres de óxido, abolladuras o filtraciones. Para conservarlas en buen estado, es recomendable revisar periódicamente las juntas y sellos, aplicar ceras protectoras o tratamientos anticorrosivos, y cuidar los acabados exteriores del vehículo.

Incluso, se pueden utilizar accesorios homologados que permitan personalizar la van sin comprometer su estructura, como defensas, racks o portaequipaje. También es común adaptar la carrocería para fines específicos, como camperización, transporte escolar, ambulancias o vehículos de reparto, según las necesidades del usuario.

Entonces, conocer las partes de la carrocería de un vehículo, especialmente si se trata de una van, sirve para entender su funcionamiento, seguridad y versatilidad. Desde los paneles frontales hasta las puertas traseras, cada componente tiene una función clara que contribuye al rendimiento y durabilidad de la van.

Ya sea que estés pensando en adquirir una van o mejorar la que ya tienes, familiarizarte con su estructura te permitirá aprovecharla al máximo en cuanto a mantenimiento o personalización. En Divemotor, tenemos en venta diferentes modelos de vans y furgonetas. Explora nuestro catálogo, contacta con nuestros asesores y encuentra el vehículo perfecto para tu negocio.