Cuando pensamos en un comprar un camión con alta seguridad, solemos imaginar frenos eficientes, cinturones de seguridad o airbags. Sin embargo, la seguridad en un vehículo es mucho más que eso. Existen dos grandes categorías que la definen: la seguridad activa y la seguridad pasiva. Ambas son cruciales en la protección de los ocupantes y en la prevención de accidentes, aunque lo hacen de manera diferente.

Seguridad activa: prevenir antes que lamentar

La seguridad activa abarca todos los sistemas y elementos del vehículo que tienen como objetivo evitar que ocurra un accidente. Se trata de tecnologías que asisten al conductor para mantener el control del automóvil en diferentes condiciones de manejo. Es decir, no actúan después del accidente, sino que trabajan constantemente para que este no suceda.

Principales componentes de la seguridad activa

Sistema de frenos

ABS (Sistema antibloqueo de frenos): Evita que las ruedas se bloqueen al frenar bruscamente, permitiendo que el conductor mantenga el control del vehículo y pueda esquivar obstáculos.

EBD (Distribución electrónica de frenado): Regula la fuerza de frenado en cada rueda según la carga del vehículo, mejorando la estabilidad.

Asistencia de frenado de emergencia: Aumenta la fuerza de frenado si detecta que el conductor no pisa el pedal con suficiente fuerza ante una situación de peligro.

Control de estabilidad: Este sistema detecta si el vehículo comienza a derrapar o perder la trayectoria deseada, y actúa aplicando fuerza de frenado en ruedas individuales o reduciendo potencia del motor para recuperar la estabilidad.

Control de tracción: Ayuda a evitar que las ruedas patinen al acelerar, especialmente útil en superficies resbaladizas como lluvia, nieve o grava.

Dirección asistida: Aunque es común en la mayoría de los vehículos actuales, sigue siendo un sistema activo de seguridad porque mejora la maniobrabilidad, sobre todo en maniobras de evasión o giros repentinos.

Suspensión: Un sistema de suspensión bien calibrado contribuye a mantener el contacto adecuado entre las ruedas y el pavimento, lo que repercute directamente en la capacidad de respuesta del camión.

Sensores y asistentes: Los asistentes de mantenimiento de carril, detectores de fatiga, cámaras de reversa y sensores de punto ciego son tecnologías diseñadas para proporcionar al conductor información en tiempo real o intervenir directamente en la conducción, con el objetivo de evitar situaciones de riesgo y mejorar la seguridad durante el manejo.

Seguridad pasiva: minimizar los daños

Mientras la seguridad activa se centra en prevenir, la seguridad pasiva entra en juego cuando, a pesar de todos los sistemas, un accidente ocurre. Su misión principal es proteger a los ocupantes del vehículo y reducir las lesiones al mínimo. Estos elementos no requieren la acción del conductor para funcionar: están diseñados para activarse automáticamente en caso de colisión.

Principales componentes de la seguridad pasiva

Cinturones de seguridad: Son el primer y más importante elemento de protección. En combinación con otros sistemas, pueden reducir drásticamente las lesiones graves.

Airbags: Diseñados para inflarse en milisegundos en caso de impacto, los airbags protegen la cabeza, el tórax y otras zonas vulnerables. Existen de diferentes tipos: frontales, laterales, de cortina o para rodillas.

Reposacabezas: Un reposacabezas correctamente ajustado previene lesiones cervicales, especialmente en choques traseros. Muchos autos actuales incorporan sistemas activos que se mueven hacia adelante durante el impacto.

Cristales laminados: A diferencia de los vidrios templados, estos están diseñados para no desprenderse en astillas o fragmentos que puedan causar heridas.

La importancia del mantenimiento y el buen uso

De nada sirve contar con sistemas de seguridad activa o pasiva si estos no están en buen estado o no se utilizan correctamente. Por eso, se debe adoptar buenas prácticas como realizar mantenimientos preventivos, comprobar regularmente el estado de los frenos, neumáticos, luces y dirección, usar siempre el cinturón de seguridad y no desactivar los asistentes de conducción sin una justificación válida.

Además, conducir con precaución, respetar las señales de tránsito y mantener una velocidad adecuada siguen siendo las medidas más efectivas para evitar accidentes. Estas acciones, aunque parezcan simples, tienen un impacto directo en la seguridad de todos los que comparten la vía.

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¿Cuál es más importante: seguridad activa o pasiva?

Ambas lo son. No existe una que reemplace a la otra. La seguridad activa busca evitar el accidente; la pasiva, reducir sus consecuencias. Por eso, lo ideal es que un vehículo cuente con un buen equilibrio entre ambas. No basta con que tenga muchos airbags si los frenos están en mal estado, ni sirve un control de estabilidad si los ocupantes no usan cinturón.

Actualmente, la mayoría de los vehículos modernos incluyen múltiples sistemas de seguridad activa y pasiva como estándar. Aun así, al momento de elegir un modelo, es recomendable investigar cuáles de estos sistemas están realmente incluidos y cómo funcionan.

Entonces, entender qué es la seguridad activa y pasiva es necesario para valorar de forma completa lo que ofrece un vehículo más allá de su diseño o potencia. Ambas dimensiones trabajan en conjunto para mantenernos seguros, ya sea evitando el accidente o protegiéndonos cuando este sucede.

Elegir un camión no debería enfocarse solo en el precio o la estética, sino también en los sistemas de seguridad que incorpora. Al final del día, estos pueden marcar la diferencia entre un gran susto o una tragedia. Invierte en seguridad con nuestros modelos de camiones en Divemotor. Contacta con nuestros asesores para conocer todo lo que nuestros vehículos pueden brindarte. Invierte en tranquilidad y confianza para tu negocio con nosotros.